Este masaje es ideal para quienes buscan un momento de tranquilidad y desconexión. Se recomienda usar ropa cómoda y evitar comidas pesadas antes de la sesión. Llevar agua para mantenerse hidratado después del tratamiento puede potenciar los efectos relajantes.
Durante el masaje relajante, es importante cerrar los ojos y concentrarse en la respiración. Permítete desconectar de las preocupaciones diarias y disfruta del ambiente tranquilo. Comunica cualquier incomodidad al terapeuta para ajustar la presión y asegurar una experiencia placentera.